Ojete Calor: la fiesta del subnopop en el Multiespacio Rabasa

El pasado sábado 30 de septiembre, el Multiespacio Rabasa se llenó de color, humor y diversión para despedir a lo grande los directos del Área 12 donde tanto hemos disfrutado este verano de la mano de producciones Baltimore. El motivo no era otro que el concierto de Ojete Calor, los reyes indiscutibles del subnopop, ese género musical tan original como irreverente que sólo ellos saben hacer.


Aunque era la tercera vez que los veía este año, tenía muchas ganas de volver a disfrutar de su espectáculo, que nunca decepciona. El dúo formado por Carlos Areces y Aníbal Gómez, dos genios del humor y la música, nos hicieron vibrar con sus canciones pegadizas y divertidas, que parodian la cultura popular, la política, el sexo y la sociedad.


El concierto empezó a las 22:00 horas, pero desde mucho antes se respiraba un ambiente festivo y de expectación. Los fans de Ojete Calor, algunos disfrazados de personajes de sus videoclips, coreaban sus nombres y esperaban impacientes el inicio del show.


Los artistas no defraudaron y salieron al escenario con una energía desbordante y una puesta en escena espectacular. Con un vestuario colorido y extravagante, como bien nos tienen acostumbrados, iniciaron el concierto con su versión personal de la canción “El rey” para luego dar paso a uno de sus hits más conocidos “0,60”, donde el público no paró de bailar, cantar y reír con las ocurrencias de los dos cómicos y sus famosas frases de 0.60 .


Ojete Calor demostró que su propuesta musical es única y original, con letras absurdas, ingeniosas y cargadas de ironía. El concierto duró casi dos horas y tuvo momentos para todos los gustos. Como ya vi en su anterior concierto, nos divirtieron con un popurrí de canciones bajoneras que pasaban desde “Coco gua gua”, “Me muero por conocerte” , “Todos contra el fuego” hasta terminar con un clásico como “Bomba”, donde los asistentes lo dimos todo y bailamos la conocida coreografía hasta salir con agujetas del recinto de tanto reír y bailar.


Otras canciones que no faltaron en el concierto fueron “Extremismo mal”, “Opino de que”, “Qué bien tan mal” y “Mocatriz”. A mí personalmente las dos últimas son dos de mis favoritas y no pueden faltar en ningún concierto de Ojete Calor.


Otra canción que no podía faltar era “Vete a tu casa”, donde les acompañó el famoso Gorila gigante , que hizo las delicias del público con sus bailes y gestos.
Fue una noche inolvidable para los amantes del subnopop, un género que solo ellos saben hacer y que nos hace pasar un rato muy divertido y sin duda un broche de oro para terminar la temporada en “Área 12” después de una programación de ensueño.
Quiero dar las gracias a Baltimore por el trato recibido y a Mi Rollo por la oportunidad de disfrutar de este concierto .

Un abrazo.

Ruth