Los zamoranos Cruce de Caminos se encargan de abrir la noche en Las armas con “Contra Viento y Marea” tema perteneciente a su primer trabajo discográfico “Cartas sobre la Mesa”. Suenan temas como “Dejando huella“, “Homenajes“, “El Umbral” o “Solo somos Música“. Les sigue una versión de “Las Calles Están Ardiendo” de M Clan que termina en un solo de batería como anticipo de la recta final.
Llega el momento de “Retales“, que sonó muy potente en el directo, para terminar con “Los Años Que Nos Quedan Por Vivir”. Este último muy disfrutado entre los asistentes con un estribillo que engancha y que todavía tengo clavado “Me preguntan qué edad tengo, tengo los años que me quedan por vivir, los demás ya no los tengo”.
El quinteto formado por Sergio Domínguez Baena y José Luis Rodríguez Villar a las guitarras, José Ángel Jiménez Gutiérrez al bajo, Alberto Hernández Valderas a la batería y Noé Velázquez Izquierdo a la voz nos ofrecieron una buena dosis de canciones rock puras y desenfadadas que nos dejaron un buen sabor de boca.
El testigo de la noche lo recoge el grupo zaragozano de rock El Vicio del Duende que abre fuego con uno de los últimos sencillos que han publicado: “El Huracán“. Un temazo que apunta a quedarse en el setlist de la banda como imprescindible. La banda juega en casa y se nota en el calor de sus seguidores que corean y bailan canciones como “Lejos“, “Números“, “Ratones” o “La Luna duerme sola“.
Cerraron su actuación en Las Armas tocando sus clásicos para delicia de los asistentes que ya no pueden dejar de mover los pies al ritmo de “La Ciudad del Viento“, “A Contrarreloj” y “Quisiera“. El broche final lo ponen con “Sigo” una canción que brilla en esas guitarras y la fuerza de su estribillo que levanta la sala. Terminan la actuación con una ovación merecida, y la sensación de haber cumplido con creces su papel de teloneros de la fiesta del rock. Excelente aperitivo que nos deja con ganas de seguir escuchando más a este grupo.
El Vicio del Duende son: Ismael Castañosa (guitarra y voz), José Miguel Rodríguez (bajo), Daniel San Emeterio (guitarra y coros) y Nacho Berdejo (batería y coros).
Una sala abarrotada, y que se quedó pequeña para el volumen de seguidores que la banda tiene en la capital aragonesa, espera con ansias a que los ejeanos salgan a escena.
Entre vítores Tako abrieron su actuación con uno de sus himnos ya clásicos “Ya estamos todos” de efecto inmediato que nos pone a cantar a voz en grito. La noche no ha hecho más comenzar pero el buen rollo entre los asistentes, las ganas de bailar y de rock son una constante a lo largo del concierto. La banda está pletórica y lo da todo sobre el escenario y el público, con muchas ganas, acompaña en esa actitud.
Nos ofrecen un setlist que combina a la perfección los clásicos de la banda con los temas del nuevo disco que están presentando en esta gira: “Porque sí”. De esta forma escuchamos en la primera parte temas nuevos como “Sin Querer”, el hit “Me Sube” o el delicado remix de “La Isla“. Estos se intercalan con temas de trabajos anteriores como “Ayer Hoy Por Siempre“, “Con Dios y Con el Diablo” o el gran himno “Todos Contra Todos” que arrasa a su paso.
Se nota lo especial del concierto por el cuidado en los detalles, así llega el momento de uno de los temas de su último trabajo, “Ponte en mi piel” en la que invitaron al escenario a la cantante Viki Lafuente. Fue uno de los grandes momentos de la noche y es que la unión de las voces de Mariano y Viki llevó a la canción a lo épico.
Siguen desgranando el nuevo disco y escuchamos “Porque sí”. Continúan con “El Alma Atada” y una batería con Chus Gancedo que vuela a lo largo de la noche, suena increíble. Llega el turno de “Pintahierros” que es toda una celebración con todo el mundo cantándola. Siguen con “Miénteme“, “Hierro Negro” y “A las puertas del deseo” que siempre es una gozada y con un gran trabajo de Flopo a la guitarra.
No teníamos pruebas pero tampoco dudas de lo que ocurriría a continuación. Suena “El Viejo Resina” y Nacho se lanzó al público que lo paseó por la sala hasta devolverlo de nuevo al escenario, otro momento clásico de todo buen concierto de los Tako que se precie. Suenan “Jarabe de tocino” y “Carpintero de condenas” que es pura dinamita y pone la sala patas arriba como previa a los bises.
TAKO vuelve a salir al escenario para que agotemos las últimas fuerzas que nos quedan en esta noche de martes. Se guardan la artillería pesada para hacernos saltar y así lanzan “Sangre y Sal”, “No puedo respirar” que nos hace sacar los puños en alto. Difícil resistirse a “La Dama de Blanco”, sonó poderosa. La explosión final la protagonizan “Poeta Nocturno”, con todo el público muy arriba cantando al unísono, y se despiden con el “El Enterrador” que nunca falla. El final es apoteósico, temazo tras temazo.
Un concierto muy disfrutable para todos los que somos seguidores de la banda que nos vamos de Las Armas con una sonrisa y encantados de comprobar que los Tako están en plena forma. Una vez más nos siguen demostrando que el Rock and Roll sigue más vivo que nunca.
¡Nos vemos por las salas!
Raquel
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